Imagina escribir un correo electrónico de lo que quieres con destino para el Universo. Cuando estes satisfecho de que tu email es muy claro, enseguida vas a pulsar "Enviar" y sabras que tu solicitud ha entrado en el éter. También sabes que el servidor del Universo es un sistema automático, y no pone en duda las peticiones de correo electrónico. Su trabajo es simplemente satisfacer todas las solicitudes.
Si uno empieza a preocuparse y se estrésa con que no obtiene lo que quería, entonces uno acaba de enviar otro correo electrónico al Universo para detener su solicitud. Y luego te preguntas por qué no has recibido áún lo que has pedido.
Una vez que uno pide, sabemos que ¡el servidor del Universo es un sistema automático infalible que nunca falla, y siempre espera recibir tu solicitud!
Que la alegría esté contigo,
Rhonda Byrne
El secreto y el poder de ... llevando alegría a miles de millones
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