Supera cualquier obstáculo con 3 preguntas simples

¿Que es lo que se interpone entre tú y lo que más deseas?

Tus respuestas se relacionan de seguro con la falta de dinero, tiempo, apoyo de tu familia o todos ellas. Los obstáculos pueden parecer tan numerosos,o tan obvios que incluso te pueden parecer muy difíciles de cambiar.

Se pueden relacionar los obstáculos de muchas maneras que las respuestas típicas que puedes emplear sean para explicarlos o resistirlos.

Ambas tipos de respuestas toman mucho tiempo y energía. Y ambas te anclan firmemente en el pasado, manteniendo tu enfoque en las áreas de tu vida que no funcionan.

Para generar alternativas de inmediato, recuerda una analogía simple...

Imagínate que estás conduciendo por una carretera escénica. De repente ves una enorme roca en medio de la carretera. En ese momento tiene varias opciones. Podrías intentar explicar cómo es que la roca terminó allí. También podrías ir al modo de resistencia, quejándote sobre el descuido en la construcción de la carretera o la falta de fondos públicos para la extracción de la roca.
O bien, puedes omitir toda esta negatividad y eliminar el obstáculo de tu vida de una vez. En lugar de explicar la roca o resistirte a ella,o sólamente conducir alrededor de ella.

Cuando se enfrentan con obstáculos, la gente responde a menudo con preguntas basadas en la explicación y resistencia, tales como:

-¿Por qué estoy tan solo?
-¿Por qué será que esto siempre me ocurre a mí?
-¿Por qué soy un fracaso?

Sin embargo, siempre tienen otra opción. Pueden hacerse preguntas que les ayudarán a conducir alrededor de cualquier obstáculo en su vida.

Las preguntas tienen un gran poder perturbador. Las preguntas dirigen la atención y junto con ellas actuamos,según cómo pensamos y cómo nos sentimos. Si deseamos crear diferentes pensamientos, sentimientos y resultados en nuestra vida, entonces hagamonos preguntas diferentes.

Iniciemos ahora omitiendo el por qué de nuestras preguntas y comencemos a formurlarnos preguntas, como:

1) ¿Cuál es la lección oculta aquí?

Hay un viejo dicho sobre el aprendizaje con la experiencia: Cuidate de aquella persona con veinte años de experiencia, porque su vida puede consistir en un año de aprendizaje y diecinueve años de repetición.

El punto es que las experiencias no vienen preconfiguradas con lecciones de habilitación. Todo depende de cómo uno interprete las experiencias y su interpretación puede cambiar con los años. Un solo evento puede tomar una contracción más cercana a lo emocional que dar un buen paso o expansión. Todo depende de cómo se interpreta ese evento.

El psicólogo Martin Seligman ha hecho una carrera mediante el estudio de cómo los seres humanos interpretamos nuestras experiencias. Señala que cada uno de nosotros tiene un estilo explicativo. Las personas crónicamente se sienten indefensas tienden que explicarse los eventos en formas tales como:

Permanencía: "yo siempre me confundo al tratar de aprender algo nuevo."
Personalización: "no soy simplemente bueno para conocer gente."
Generalización: "yo solo soy el tipo de persona que no continuo, no importa qué tipo de objetivos se establezcan."

Las personas optimistas utilizan un estilo diferente. Se explican los eventos en formas de la siguiente manera:

Temporal: "cuando me siento confundido, me hago preguntas que me llevan a entendimiento."
Externos: "me resulta difícil hablar con gente en los bares, así que los invito en su lugar a restaurantes o sitios mas tranquilos."
Específicos: "me parece difícil alcanzar objetivos a largo plazo, por lo que por ahora me centraré en objetivos a corto plazo."

Suelen interpretar los obstáculos para producir señales de avance en lugar de signos de alto.

Toman los problemas como si fueran señales de que el mundo se expande para acomodar el crecimiento. En lugar de resistirse a un reto, sin ser magros en ello. Se Pregúntan: ¿Cómo puedo interpretar este evento de una manera más poderosa? ¿Cual es la lección positiva que estoy esperando aprender aquí?

2) ¿Que es lo genial de tener este problema?

Hay una respuesta fácil a esta pregunta: "¡ nada!" Sin embargo, viendo más allá de esta respuesta instintiva rápidamente podemos abrir una perspectiva.

Tony Robbins ofrece un ejemplo en su libro "Despertando al gigante interior". Recuerda un momento cuando se había quedado en el camino a casi 100 días de los 120 que se habia propuesto para una meta. De regreso a su oficina, se encontró con una pila de documentos urgentes y una lista de 100 llamadas telefónicas que necesitaba devolver personalmente. Antes de hacer estos descubrimientos, estaba muy cansado, es más se sentía agotado.

Tony logró desplazar su estado interno simplemente preguntandose: ¿Qué es lo genial de tener este problema? Entonces se dio cuenta que hace unos pocos años habría estado agradecido de recibir llamadas de cuando mucho unas veinte personas — ahora tenia mas de un centenar de personas incluso con una enorme reputación nacional.

Esta visión fue suficiente para romper su patrón de frustración. Se dio cuenta y descubrió que podia sentirse agradecido de que tanta gente que el amaba y respetaba estaban dispuestas a conectarse con él.

3) ¿Cuál es mi siguiente acción?

Esta pregunta brilla por si misma porque es un enfoque para las soluciones. Pase lo que pase,tu puedes elegir qué decir y hacer como respuesta. En lugar de manifestar resistencia o explicación, puedes elegir tu próxima acción.
Las personas exitosas tienen un sesgo para la acción. Siempre añaden inspiración e intención o la mezclan, y obtienen un impulso imparable.