CUANDO ESCRIBO.....

ALGUNA VEZ TE HAS SENTIDO TAN BIEN..... QUE INCLUSO PARECE QUE TODO LO QUE HACES Y LAS COSAS TE ESTAN SALIENDO DE MARAVILLA, EN UNA SITUACION ASI , TODAS LAS ACTIVIDADES QUE EMPRENDEMOS NOS PARECEN TAN FACILES....SE SIENTE UNO INCREIBLEMENTE CREATIVO Y COMO QUE LA SUERTE ES NUESTRA ALIADA....ADEMAS NOS EMBARGA UNA GRAN FELICIDAD, BUENO, ES AHI, SI PRECISAMENTE EN ESOS "MOMENTOS MAGICOS", QUE YO APROVECHO PARA ELABORAR CADA UNA DE LAS ENTRADAS DE MI BLOG O BITACORA Y LAS QUIERO COMPARTIR CONTIGO....CUANDO NO ME SIENTO SINCERAMENTE FELIZ SIMPLEMENTE NO ESCRIBO........

miércoles, 24 de noviembre de 2010

COMO PUEDO TENER EL TRIUNFO TOTAL....

¿QUE HAY QUE TOMAR EN CUENTA PARA TENER UN EXITO DEFINITIVO?


Ya sea trate de una máquina-herramienta, de una computadora o de un ser humano, ha de sercongruente. Sus distintas piezas han de colaborar a un mismo fin; cada acción debe ayudar a las demás acciones para que todo funcione. Si las piezas de una máquina quisieran funcionar simultáneamente en dos sentidos distintos, se perdería la sincronización y la máquina acabaría por romperse.

Cuando un individuo consigue una cosa, pero en el fondo desea otra —por nebulosa que sea la conciencia de ese deseo—, no está totalmente satisfecho ni realizado. Otro tal vez alcance una meta, pero violando para conseguirlo sus propias convicciones
acerca de lo bueno y lo malo: conflicto a la vista.


Para cambiar de verdad, avanzar y prosperar hemos de ser conscientes de las normas que nos aplicamos a nosotros mismos y a los demás. Es preciso saber cuál es nuestra verdadera medida del éxito o del fracaso. De lo contrario, aunque poseyéramos todas las cosas del mundo seguiríamos sintiéndonos como si no tuviéramos nada. Tal es el poder de ese elemento crítico y definitivo al que llamamos valores.


¿Qué son los valores? Sencillamente, las creencias particulares, personales, individuales, que uno sustenta en relación con lo que le parece importante. Tus valores son sus sistemas de creencias sobre lo justo y lo injusto, lo bueno y lo
malo, pero el argumento tiene validez universal. Nuestros valores son las cosas hacia las cuales hemos de tender necesariamente; de lo contrario, no nos sentimos plenamente realizados. La sensación de congruencia, de armonía y unidad personal con uno mismo deriva del sentimiento de estar realizando nuestros valores a través de nuestro comportamiento real. Incluso determinan aquello de lo que huiremos. Rigen todo nuestro estilo de vida. Determinan cómo reaccionaremos ante cualquier experiencia vital dada. Vienen a ser como el sistema operativo de una computadora. Cuando uno introduce un programa, que ella lo acepte o no y que lo use o no,
dependerá del sistema operativo que traiga programado de fábrica. Los valores son como el sistema operativo del discernimiento en el cerebro humano.


















Desde cómo viste, qué coche conduce, en qué casa vive uno y con quién se casa (si es que se casa), hasta cómo educa a sus hijos, desde las causas que uno apoya hasta lo que elige hacer para ganarse la vida, la influencia de los valores no conoce límites. Son la base que define nuestras reacciones ante cualquier experiencia de la vida. Son también la clave definitiva para quien quiera predecir su propia conducta así como la de los demás: la llave maestra que abre la caja de nuestra magia interior.

Por ahí bin icen que: El hombre que no sabe por qué estaría dispuesto a morir no sirve para vivir.Los valores, dada la primacía que les concedemos, tienen un poder emocional increíble. Ningún lazo entre los individuos es más fuerte que la unión alrededor de los valores más elevados. Y ninguna fuente de discordia es tan traumática como provocar comportamientos que causen conflictos de valor.


Una persona quizá se sienta traicionada debido a un fracaso amoroso.Tal vez haya habido engaño, o tal vez sólo una equivalencia diferente de la palabra «amor» en el
uno y el otro.Por eso es absolutamente crucial llegar a construir un mapa tan exacto como sea posible y determinar cuál es el mapa de la otra persona. No basta con escuchar las palabras que usa; hay que entender lo que significan. Para ello, hay que preguntar con tanta flexibilidad e insistencia como sea necesario para llegar a formarse una equivalencia compleja y exacta de las jerarquías de valores. Muy a menudo estas nociones difieren tanto que dos personas pueden no tener nada en común aunque profesen los mismos valores, y dos personas que profesan valores diferentes a lo mejor llegan a descubrir que en realidad desean lo mismo.

La comunidad de valores es la base para las relaciones definitivas. Si dos personas tienen valores totalmente asociados y coincidentes, su relación podrá durar mientras vivan; si sus valores son totalmente distintos, una relación duradera y armoniosa
resultará poco probable. Sin embargo, son pocas las relaciones clasificables en una de estas categorías extremas.

En consecuencia, uno debe hacer dos cosas. La primera, descubrir cuáles son los valores comunes a fin de poder establecer con ellos un puente sobre los que son distintos. La segunda, tratar de promover y satisfacer los valores más importantes de la otra persona, en la medida que nos sea posible. Ésa es la base de una relación poderosa, estimulante y duradera, bien sea en los negocios, en el aspecto
personal o en el familiar.


Los valores trazan la línea general que define la congruencia o la incongruencia, y que los individuos estén motivados o no. Si conoce usted sus valores, tiene en sus manos la llave maestra. De lo contrario, quizá consiga crear un comportamiento
poderoso que será duradero o no, y conducirá al resultado deseado o no. Los valores son como un tribunal de última instancia. Ellos deciden qué conductas funcionarán o no, y cuáles producirán los resultados perseguidos o sólo incongruencia.


Y así como las personas tienen ideas diferentes acerca de lo que significan los valores, también siguen caminos diferentes para determinar si esos valores están siendo satisfechos. Los valores cambian, a veces de un modo radical, pero más a menudo de forma gradual e inconsciente. Algunos tienen un procedimiento de confirmación que no va unido a ninguna clase de valor; saben lo que quieren, pero
no saben por qué. Así que cuando lo consiguen se produce como un espejismo; por motivos culturales se convencieron de algo que no deseaban en realidad.


La incongruencia entre los valores y los comportamientos es uno de los grandes temas
de la literatura y del cine. Es preciso desarrollar una atención permanente
a los valores y a los cambios que éstos experimentan,también conviene revisar con regularidad los valores que más le motivan a uno. En cualquier caso, es de importancia capital que conozcamos cuáles son nuestros valores más altos, de manera que las líneas de conducta que elijamos estén de acuerdo con ellos. De lo contrario, tendríamos que pagar más adelante el precio emocional por no habernos atenido a lo que era más importante en nuestra vida. Los comportamientos asociados a valores más altos en la escala priman sobre los ligados a valores de menor entidad.

La congruencia se obtiene así, esencialmente, mediante un proceso de redefinición del marco en que se sitúa una experiencia.A veces la incongruencia procede, no de los valores mismos, sino de los procedimientos de confirmación de diferentes valores. El éxito y la espiritualidad, por ejemplo, no generan necesariamente incongruencia. Tener mucho dinero no significa estar cerrado a las cosas del espíritu, como tampoco el vivir con austeridad es necesariamente una garantía de espiritualidad.Tener mucho dinero no significa estar cerrado a las cosas del espíritu, como tampoco el vivir con austeridad es necesariamente una garantía de espiritualidad.


Muchos tenemos conflictos de valores. Queremos salir al mundo y hacer grandes cosas, pero también tumbarnos en la playa; deseamos pasar el tiempo con nuestra familia y también trabajar lo necesario para triunfar en nuestra profesión. Deseamos seguridad y al mismo tiempo queremos excitación. Cierta medida de conflicto es inevitable, puesto que enriquece la vida y le da consistencia. El problema se plantea cuando son valores básicos los que tratan de llevarnos a direcciones diferentes, considera tu propia jerarquía de valores y sus procedimientos de confirmación, a fin de averiguar la naturaleza
de tus conflictos. Conocerlos bien es el primer paso para resolverlos. Los valores son tan primordiales para la sociedad como para los individuos. Los valores cambian y, con ellos, las personas. Los únicos que no cambian son aquellos que no respiran. En consecuencia, conviene advertir el flujo de los hechos y moverse al compás del cambio. Un ejemplo es el de quienes se obstinan en un desenlace único, sólo para descubrir al final que no les satisface. Muchos de nosotros nos hemos visto en situaciones así, y más de una vez. Para evitarlo, hemos de permanecer
activamente atentos a nuestros valores y a los procedimientos de confirmación que hemos construido para ellos.

En la vida es preciso consentir cierto grado de incongruencia o incoherencia: forma parte de la dualidad del ser humano.Si advertimos la incongruencia pero no sabemos comprenderla, a menudo emprenderemos acciones equivocadas. Queda dicho que el primer paso para vencer los conflictos entre valores es entenderlos.


La Fórmula para un Éxito Definitivo se verifica para los valores lo mismo que para todo lo demás. Es necesario saber lo que uno quiere: nuestros valores primordiales
y la jerarquía de los mismos. Y hay que lanzarse a la acción. Y hay que desarrollar agudeza sensorial para saber hacia dónde se mueve uno; y la flexibilidad necesaria para cambiar. Si tu conducta actual no armoniza con tus valores, cambia la conducta para resolver el conflicto. Si queremos ser modelos eficaces, lo que más importa es
representar unos valores fuertes y una conducta congruente.


Modelar ciertos comportamientos, en efecto, es importante, pero los valores pasan por encima de casi todo lo demás. Descubrir los valores de los demás es cuestión, sencillamente, de averiguar lo que juzgan más importante. Sabiendo eso, uno conocerá mejor no sólo las necesidades de ellossino también las suyas propias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tanto a mi como a los que visitan el blog nos gustaria saber que opinas de las entradas, animate dejame un comentario........LO PUEDES HACER DE MANERA ANÓNIMA!!