
QUIERO RECUPERAR ESA CAPACIDAD INNATA DE LEER LOS CÓDIGOS DE LA NATURALEZA HUMANA, YA QUE ESTA NOS HABLA TODO EL TIEMPO,MUCHAS VECES SIN UN LENGUAJE VERBAL, PERO HEMOS PERDIDO ESA VIEJA GRAMATICA DE LA INTUICIÓN, QUIERO VOLVER A ESE LENGUAJE NATURAL DEL AMOR QUE NOS ACERCA A LAS EXPERIENCIAS AFECTIVAS MENOS CONTAMINADAS, MAS HONESTAS, RESPETUOSAS, DIGNAS Y REALISTAS CON UNA ACTITUD PURAMENTE BUDICA DE CONTEMPLACION, GRATITUD Y DESEO DE COMPARTIR.
CUANDO ESCRIBO.....
ALGUNA VEZ TE HAS SENTIDO TAN BIEN..... QUE INCLUSO PARECE QUE TODO LO QUE HACES Y LAS COSAS TE ESTAN SALIENDO DE MARAVILLA, EN UNA SITUACION ASI , TODAS LAS ACTIVIDADES QUE EMPRENDEMOS NOS PARECEN TAN FACILES....SE SIENTE UNO INCREIBLEMENTE CREATIVO Y COMO QUE LA SUERTE ES NUESTRA ALIADA....ADEMAS NOS EMBARGA UNA GRAN FELICIDAD, BUENO, ES AHI, SI PRECISAMENTE EN ESOS "MOMENTOS MAGICOS", QUE YO APROVECHO PARA ELABORAR CADA UNA DE LAS ENTRADAS DE MI BLOG O BITACORA Y LAS QUIERO COMPARTIR CONTIGO....CUANDO NO ME SIENTO SINCERAMENTE FELIZ SIMPLEMENTE NO ESCRIBO........
martes, 13 de octubre de 2009
LA MUJER PERFECTA................
Erase una vez una muchacha de nombre Nadia cuya belleza atraía a todos los que la conocían.
A pesar de ello, Nadia se sentía muy sola. Tras la alegría del primer encuentro con sus pretendientes, les encontraba defectos. Entonces, sentía que su amor se marchitaba y seguía anhelando su ideal de pareja perfecta.
Un día, Nadia oyó hablar de un sabio que a todos conmovía con sus palabras. Aquella noche, decidió consultarle su problema. "Tal vez -se decía- me pondrá en el camino de ese hombre ideal que sueño.".
A la mañana siguiente, llegó hasta él y, tras exponerle su mala suerte, le dijo: -Necesito hallar la pareja perfecta. ¿Qué podéis decirme? Una persona como usted, sin duda, habrá encontrado la pareja perfecta.
Aquel anciano, mirando a Nadia con brillo intenso en sus ojos, le dijo: -Pasé mi juventud buscando a la mujer perfecta.
En Egipto, encontré a una mujer bella e inteligente, pero era muy inconstante y egoísta.
En Persia, conocí a una mujer que tenía un alma buena y generosa, pero no teníamos aficiones en común. Y así una mujer tras otra.
Al principio, me parecía haber logrado "el gran encuentro", pero, pasado un tiempo, descubría que faltaba algo que mi alma anhelaba.
Fueron transcurriendo los años hasta que de pronto, un día.. -dijo el anciano haciendo una emocionada pausa- la vi resplandeciente y bella.
Allí estaba la mujer que yo había buscado toda mi vida. -¿Y qué pasó? ¿Te casaste con ella? -replicó entusiasmada la joven Nadia.
-Al final. la unión no pudo llevarse a cabo. -¿Por qué?, ¿por qué? -Porque al parecer -le dijo el anciano con un gran brillo en sus ojos-ella buscaba la pareja perfecta.
De cuentos para aprender a aprender (Gaia), de J.M.Doria. Compartido por Alfredo Celis
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tanto a mi como a los que visitan el blog nos gustaria saber que opinas de las entradas, animate dejame un comentario........LO PUEDES HACER DE MANERA ANÓNIMA!!